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Presentación de : Bujarin, Ossinski, Radek, Smirnov. La revista KOMMUNIST, Moscú 1918

Los comunistas de izquierda contra el capitalismo de Estado

La revue "Kommunist" 1918

 

Es un placer poner a disposición de nuestros lectores un extracto y una breve presentación de una obra que publica los análisis y críticas desarrollados por la primero expresión de la Izquierda Comunista Internacional con relación a la involución del proceso revolucionario en Rusia. Aquí no se da una crítica calumniosa a posteriori, porque la política del partido bolchevique fue sometida a una crítica radical por sus autores mas decididos desde los primeros meses de la revolución. Este libro, al que nuestros colaboradores han contribuido ampliamente, salió de la imprenta en diciembre de 2011, en las Ediciones Smolny. Se puede leer a continuación una breve presentación, y un extracto del contenido de esta obra puede verse en el adjunto fichero PDF.

Entre abril y junio de 1918 aparecieron en Moscú los cuatro números de la revista KOMMUNIST. Contenía análisis y críticas elaborados por la primera fracción de izquierda surgida en el seno del partido bolchevique tras la toma del poder en octubre de 1917. Cristalizó en enero de 1918, en oposición a la política de Lenin tendente a una paz separada con Alemania (tratado de paz que será firmado en Brest-Litovsk el 3 de marzo de 1918).

Esta fracción, animada por Bujarin, Ossinski, Radek y Smirnov rechaza la política de ‘compromiso’ elegida por Lenin porque, según pensaban, la firma de una paz por separado con Alemania iría contra el desarrollo de la revolución en otros países, al permitir al militarismo de las potencias centrales concentrarse en el frente occidental y aplastar con mas facilidad los movimientos revolucionarios. Es la causa de que Bujarin acusara a Lenin de ‘alta traición contra la revolución’. Esta preocupación estaba tanto mas justificada desde que, en el artículo nº 2 del tratado de paz, los bolcheviques se comprometían a no efectuar propaganda revolucionaria en el seno de las potencias centrales, es decir ¡la autoprohibición de extender la revolución! Enterado de las concesiones que se efectuaron en ese tratado así como las intenciones de Lenin de aceptar la ayuda del imperialismo inglés y francés, Bujarin escribirá que “Hacéis del partido un montón de estiércol”.

Hay que destacar que, a pesar de las severas críticas y acusaciones contra las orientaciones defendidas por los círculos dirigentes del partido bolchevique, esta fracción tuvo a su disposición todos los medios políticos y materiales necesarios para defender su punto de vista, incluyendo el aspecto organizacional con prensa y reuniones separadas. Así pues, la decisión de firmar el tratado de Brest-Litovsk se tomará en una libertad total de opinión y de organización en el seno del partido bolchevique.

Es muy importante subrayar la capacidad de este último de poder vivir con divergencias significativas en su seno, en el momento actual en que los actuales grupos de la Izquierda Comunista que reivindican esta herencia dan muestra de una total incapacidad en este aspecto. En efecto, y aunque la duración de la vida de estos grupos es ya de unas 3 o 4 veces la de los bolcheviques, ninguno de ellos ha podido existir en buena convivencia con ninguna tendencia o fracción en su seno. Peor aún, todos los debates que han mantenido se han saldado con escisiones cada vez mas graves. Se podría parafrasear la frase fustigante de Bordiga en respuesta a Stalin: «La historia de las fracciones es la historia de Lenin» diciendo que «la historia de los grupos actuales de la Izquierda Comunista es la historia de la ausencia de fracciones». En otras palabras, muchas discusiones sobre las causas de la degeneración de la revolución rusa serán aún necesarias para hacer sitio a estas prácticas heredadas de otra época y aupar a los grupos que se reivindican herederos de Lenin a la altura de las capacidades de este último de poder vivir y debatir en total libertad con múltiples tendencias y fracciones [1]].

Sin embargo, el interés de esta fracción no afecta solamente a las lecciones que se pueden sacar de la defensa del internacionalismo intransigente y sobre el funcionamiento de una organización revolucionaria; atañe también a la visión que plantea sobre la política ejecutada por el partido bolchevique. Esta visión crítica se extiende a toda una serie de cuestiones cruciales relativas a la esencia misma de una revolución socialista y a la manera de conservarla en las difíciles condiciones de entonces. Una grieta radical surgirá entre la voluntad de los comunistas de izquierda de aplicar las lecciones de Marx sobre la Comuna de París –la creación de un semi-Estado sobre las ruinas del antiguo y basado en el poder de los consejos obreros- y la orientación defendida por Lenin, consistente en edificar un capitalismo de Estado como antecámara del socialismo.

La publicación de estos documentos originales permite también contemplar de una manera nueva sobre estas grietas que atraviesan el medio revolucionario actual. Así, el prefacio y el postfacio de esta obra proporcionan un importante material que permite evaluar la proximidad de las posturas de esta fracción de izquierda con los análisis desarrollados por las izquierdas de la Europa del Oeste, principalmente las de Rosa Luxemburgo antes y después de la revolución de octubre de 1917 [2]]. Permiten al lector situar todos estos debates en el contexto de la ola revolucionaria y el estado del movimiento obrero de aquella época. Se propone un cuadro de comprensión a fin de pensar de manera más correcta, consideramos, la parte de los factores externos e internos que han presidido la degeneración de esta revolución. Igualmente, es de subrayar la gran claridad conseguida por esta fracción de izquierda sobre la involución de la trayectoria tomada por la revolución rusa, claridad que la izquierda comunista en Europa occidental solo alcanzará años mas tarde.

Por eso pensamos que mas allá de las contribuciones políticas aportadas por esta primera fracción, una reevaluación mas correcta de la experiencia soviética aún deberá efectuarse a partir de la traducción de los documentos originales de los momentos mas cruciales y de los debates que les han animado, especialmente documentos correspondientes al primer año en el poder y los relativos a la emergencia de las sucesivas fracciones de izquierda en el seno del partido bolchevique. Es una de las tareas que se asignan numerosos colaboradores de Controversias y que proporcionará material para otras obras.

Por todos estos motivos y muchos otros que se explican en el libro, celebramos su publicación y lo recomendamos vivamente a nuestros lectores.

 

C.Mcl, 21 de Enero de 2012.

 

 Esta obra ha sido brevemente presentada en la página web de Smolny.

 Su precio es de 20 euros, consta de 408 páginas y fue publicado en diciembre de 2011 en las Ediciones Smolny, con ISBN 978-2-9528276-3-8

 Disponible via Smolny distribución43, Rue de Bayard, 31 000 Toulouse Francia.

 

[1[Este ejemplo de total libertad de opinión y de organización en el seno del partido bolchevique, incluyendo críticas y acusaciones tan graves como la ‘traición de los intereses de la revolución’ o la transformación del partido ‘en un montón de estiércol’ ilustra que la política de comisiones de investigación instauradas por la Corriente Comunista Internacional para juzgar y romper ciertas críticas y acusaciones políticas enunciadas por sus militantes hacia las posiciones oficiales de esta organización es contraria a toda la experiencia del antiguo movimiento obrero. Es tanto mas absurda en cuanto estas críticas son de tenor claramente menor y de consecuencias nada parecidas a las emitidas en 1918. De nuevo, no se han extraído todas las lecciones de la historia y el peso de la contrarrevolución pesa gravemente sobre la práctica de las actuales organizaciones de la Izquierda Comunista que se considera heredera de los bolcheviques.

[2[Respecto a fechas posteriores a Octubre de 1917, nos referimos mas especialmente a los escritos de Rosa Luxemburgo en las Lettres de Spartacus nº 8 de enero de 1918: La responsabilidad histórica, y del nº 11 de setiembre de 1918: La tragedia rusa.